Asturias tiene un nuevo sol en Quince Nudos (Ribadesella)
El restaurante Quince Nudos se ha confirmado como uno de los restaurantes destacados en sus más de una docena de años. El chef Bruno Lambán y su equipo han conseguido ser un referente en los arroces y por su selecta carta donde la calidad de los productos es uno de sus principios.
Algo más de una década de trayectoria tiene la casa de este incansable buscador de sueños. Inquieto, dinámico y tenaz, este estudiante de geología llegó al mundo de la gastronomía casi por casualidad, coqueteando durante su etapa universitaria con los fogones y descubriendo ahí cuál era su auténtica vocación.
En 2012 abrió las puertas de Quince Nudos y se embarcó en su propia aventura, un restaurante con aires de taberna marinera donde plasmar su visión de la vida a través de la gastronomía, con platos equilibrados que aúnan frescura y creatividad con recuerdo y raíces. Hoy, Lombán recibe feliz su primer sol Repsol y lo hace con “mucho orgullo, porque el reconocimiento de esta guía, indiscutible referente, es el premio al esfuerzo y al trabajo diario”.
En los últimos años, apunta el chef, ha buscado “redondear la experiencia de los comensales, con mejoras 360: infraestructura, carta, servicio, bodega, sala, cocina…”. Sin duda, una apuesta más “limpia, fina y trabajada” que es muestra de una constante evolución. Al frente de la sala se encuentra Sergio Gabarri Dual, también sumiller del restaurante que, con acierto, aconseja a la clientela tanto en materia de vinos como en lo referente a la carta y propuestas fuera de ella. Quince Nudos mantiene intacta la esencia con la que nació, apostando por un producto de alta calidad, de cercanía y sin enmascarar para lograr así mantener todos sus sabores y características primarias.
En cuanto a la propuesta, durante el día, los arroces siguen llevándose todo el protagonismo, mientras que por la noche, los comensales optan por entradas ligeras pero con mucho sabor así como por pescados frescos, según la pesca del día, y carnes maduradas más especiales. Dos restaurantes en uno para hacer las delicias de cualquier comensal.
Y aquellos que no puedan acercarse a Ribadesella, siempre pueden optar por sus icónicos arroces a domicilio, porque con tan solo una paellera de las de toda la vida, un horno (sí, se terminan en horno) y menos de 20 minutos, cualquier persona (por pocas habilidades culinarias que tenga) será capaz de sorprender a sus invitados con un arroz absolutamente impecable (envío a cualquier punto de la península por transporte refrigerado).
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