La forma más sencilla de crear etiquetas de vino personalizadas con código QR
La pasión de España por sus vinos, famosos por su sabor único y variedad, está tomando un giro moderno. Con las nuevas reglas europeas, las bodegas están innovando para ser más transparentes y acercarse a los amantes del vino.
Ahora, con un simple escaneo de un código QR, se pueden descubrir los secretos de cada botella, conectar con la historia detrás del vino y disfrutar de una experiencia más personal, todo desde la palma de la mano.
¿Cómo el código QR facilita el cumplimiento de la nueva normativa europea?
La Unión Europea se ha puesto seria con las reglas del juego en cuanto al etiquetado de vinos. Ahora, para que el comensal sepa qué está bebiendo, han hecho obligatorio que le cuentes todo: desde qué uvas se usaron hasta cómo se hizo el vino.
Y para que esta información no lo abrume, han pensado en algo genial: los códigos QR vinos. Un pequeño escaneo y ¡pum! Toda la historia del vino en la mano, clara y sin rodeos. Esto incluye:
- Información nutricional: valor energético, contenido de alcohol, azúcares, etc.
- Origen: región, denominación de origen, parcela de cultivo.
- Varietales: uvas utilizadas en la preparación.
- Elaboración: técnicas de vinificación, crianza y embotellado.
- Alérgenos: indicación de posibles alérgenos presentes en el vino.
- Idioma: la información puede presentarse en múltiples idiomas para acercarse a un público internacional.
Ventajas de las etiquetas de vino personalizadas con código QR
Los códigos QR permiten a los consumidores verificar la autenticidad del producto y conocer en detalle su procedencia. Esta información genera confianza y fomenta un consumo responsable. Por eso se deben conocer sus ventajas:
- Acceso a información detallada: al escanear un código QR, los comensales pueden descubrir el origen del vino, la variedad de uva, los métodos de cultivo, detalles del proceso de fermentación y notas de cata. Satisface el interés del público por conocer la trazabilidad de los productos que consumen.
- Actualizar sin reimprimir etiquetas: una vez que el código QR se crea, se puede actualizar la información digital sin tener que cambiar la etiqueta física. Ahorra en costos a la bodega y asegura que los consumidores siempre tengan acceso a datos precisos y actualizados.
- Experiencias digitales exclusivas: algunas bodegas usan códigos QR para llevar a los comensales a contenido multimedia que hace que la experiencia de degustación sea aún mejor. Pueden incluir vídeos sobre la historia de la bodega, entrevistas con enólogos o recomendaciones de maridaje.
¿Cómo crear una etiqueta de vino con código QR en pocos pasos?
Hoy en día, puedes crear códigos QR únicos para las etiquetas de vino con facilidad y rapidez. Todo gracias a diferentes plataformas y herramientas disponibles.
SwearIt, por ejemplo, ayuda en esta adaptación sin problemas a las últimas regulaciones europeas, y brinda múltiples funciones para personalizar la experiencia.
- Generar el contenido que enlazará el código QR: define qué información se quiere compartir (ficha técnica del vino, sobre la bodega, vídeos, etc.).
- Crear el código: la plataforma permite generar un código QR de forma rápida y personalizar su apariencia para que se integre con el diseño de la etiqueta.
- Diseñar la etiqueta: una vez obtenido el código, se puede añadir al diseño de la etiqueta. Asegúrate que esté visible y accesible para el consumidor.
- Probar y ajustar: antes de imprimir, es recomendable probar el código QR que redirige a la información deseada.
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