IMAGINACION , IMAGINACION Y MUCHA MAS IMAGINACION.
Perdonad que insistamos, pero al día de hoy con la crisis que existe, no queda más remedio que trabajar, imaginar y atraer al cliente, sacarle a la calle, que venga a comer o a cenar a nuestro establecimiento.
En el mes de septiembre ya lo decíamos, en nuestro artículo ¿Contra la crisis? Imaginación.
En un periódico de tirada nacional, el domingo 22 de marzo indicaba que la crisis castiga tanto a los restaurantes en Madrid como de cualquier otra región, pues los españoles cenan en casa.
No somos muy partidarios de las cifras (son fácilmente manipulables en algunos casos), pero la realidad es que las cenas con amigos se celebran un 59% en casa y el 41% en restaurantes.
Quizás algunos establecimientos no hayan visto que «hay que apretarse el cinturón», es decir, no podemos seguir cobrando el vino y el agua a precios desorbitados, por ejemplo.
La media de una cena en restaurante, según la misma fuente, es de 28 euros por persona, mientras que en casa es justamente la mitad, 14. No estamos muy de acuerdo con ello, porque hay que incluir el trabajo, la molestia del anfitrión, etc. Siempre se disfruta mucho más en un restaurante, aunque sea más caro.
Nosotros apostamos por aquellos detalles que nos parecen excesivos.
El vino. No entendemos por qué una botella que en bodega cuesta 5 euros, en la mesa cuesta 18 o 20 euros. De acuerdo que hay que poner la cristalería, las copas, fregarlas, etc., pero no es de recibo, con un producto que no hay que tocar (simplemente descorchar), que multipliquen por 3,5 veces su costo. No hablamos de grandes vinos, hablamos de vinos adecuados y que tienen dicho precio.
El agua. Por qué una botella de agua (de entrada solamente tienen de 1/2 litro), que cuesta 0,50 euros en mesa se eleva el costo a 2 o 3 euros. ¡Cuatro o seis veces su costo!.
Los cafés. Un café que de costo tiene 12 céntimos de euro. ¿Por qué cobran en mesa 2 euros? De acuerdo del costo de la cafetera, el azúcar, el café, la cucharilla, la taza, todo ello, pero es multiplicar por 10 veces el coste.
No criticamos el costo de plato que hay que elaborar, trabajar, cuidar y servir. Siempre en buen estado, con trabajo, ¿pero una bebida que es descorchar o abrir?.
Todo ello conlleva a que uno ve la carta, entra, calcula que va a costar entre 20-22 euros por persona, termine costando 35. La culpa… la bebida y cafés.
Estudien y piensen el costo que tendrían por regalar la primera botella de vino (3/4 de litro), de un buen vino, con un costo en bodega de 4-5 euros, así como una botella de agua, de litro, por cada 3-4 personas. Genial. Costo para el establecimiento: 5 euros, sentimiento del cliente: regresar la próxima vez.
Seguro que vds., como profesionales, son capaces de desarrollar otras muchas ideas, adelante, el boca a boca funciona estupendamente. Ganaremos menos por mesa, pero tendremos más mesas ocupadas.
Adelante y éxito.