Lua una nueva estrella Michelín en la capital (Madrid)
Ha sido el único restaurante madrileño que ha recibido este reconocimiento en la Guía Michelín edición España y Portugal del año 2016. Su chef, Manuel Domínguez, es el único gallego en Madrid que tiene la referida estrella en su restaurante. Es como haber conseguido la Lluna (traducción de Lua).
Once años en Madrid ofreciendo un menú degustación único y que hace cuatro años se trasladó a su nueva ubicación en Eduardo Dato (anteriormente estuvieron Zaranda y Zorzal entre otros). Un local amplio y luminoso, donde la cocina evolutiva y con tradición del siglo XXI ha conquistado a sus clientes.
Este cocinero de cuna gallega, con tradición familiar pulpeira, indica que es un reconocimiento a la trayectoria de todo el equipo y que siempre está en continuo aprendizaje. Lúa se define por su menú degustación único que va cambiando según dicta el mercado y la temporalidad de los productos, fórmula que Manuel mantiene desde el principio. Sin embargo, con el paso de los años, el local se ha ido adaptando a las necesidades del público asiduo hasta llegar a la última reforma en la que una parte del comedor gastronómico se ha convertido en una zona de barra donde ofrece una carta de raciones y medias raciones perfecta para picotear y compartir. Con esta creación Lúa se ha convertido en un restaurante versátil, que se adapta al cliente que no busca el menú gastronómico a diario, un restaurante con raíces gallegas que ofrece una cocina actual y sincera basada en el cuidado y en la dedicación al producto.
En el comedor gastronómico se puede disfrutar del menú Lúa que consta de nueve pasos: tres aperitivos, dos entrantes, dos platos principales y dos postres, que varían según la temporada. Sopa de ají de gallina, zamburiña y torrezno de bacalao; pulpo con espuma de ceviche; raya en caldeirada con crema de ibéricos y boletus; lomo de venado con puré de castañas y cuscús de frutos rojos o brownie de chocolate con crema de vainilla, helado de turrón y trufa negra son algunas de las propuestas.
En la nueva zona de barra la carta es más informal con opciones para todos los gustos, mesas altas, mesas bajas y una cómoda barra donde disfrutar de platos con mucho acento gallego como el pulpo en tres versiones diferentes -el clásico à feira, en ceviche o un pulpito al horno con puré de patata y ajada-, trampantojos divertidos como las bravas de langostino, los nuggets de mollejas, el taco de rabo de toro o los guisos de toda la vida como los callos con garbanzos, entre otras propuestas.
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