Madrid Marriott Auditorium nos traslada a los bosques y serranías (Madrid)
A través de su restaurante Kalma, que como su nombre indica es cómodo y relajado por este paseo campestre que nos ofrece con sus Jornadas Gastronómicas que no solamente recoge las setas y hongos, propios del otoño, sino que incluye otros productos que nos llegan en esta temporada, así que las referidas jornadas se denominan: Gastronomía de los Boletus, las Raíces y las Verduras de Umbría.
Estas joyas que nos ofrece la naturaleza especialmente en el otoño se pueden degustar en este restaurante los días 5, 6 y 7 de Noviembre, con un menú especial diseñado para la ocasión y que incluye el maridaje desde el aperitivo a los postres, todo ello por un precio de 38€. Con varias opciones en los entrantes, platos principales y postres. Una ocasión única para disfrutar del agradable ambiente de este restaurante, su atención y por supuesto exquisitos platos.
Para disfrutar de este menú nos hemos reunido seis personas, todas amantes de la buena mesa y de estas delicias. Indicar que el restaurante estaba ocupado prácticamente en su totalidad, siendo un día entre semana no festivo. Dos detalles que predisponen a sentirse cómodo. El primero, a la entrada de la Sala, un «escenario campestre», en el que se pueden ver una gran variedad de setas, hongos, verduras,… todas con su nombre. El segundo es un pequeño «campo de setas» que colocan en el centro de la mesa que al levantar el cristal desprende un fresco y agradable olor a campo. ¡¡¡Vamos a coger setas!!! Eso sí, ya en la mesa y condimentadas.
Consultado el menú decidimos elegir platos diferentes para conocer todos ellos. No es difícil porque todos los platos son muy apetecibles. El aperitivo consiste en un consomé de setas y raíces variadas acompañado de un buñuelo de puerro y rabo de toro. El mismo se armoniza con un Vintage Reserva de Freixenet. D.O. Cava. Excelente comienzo, el buñuelo cremoso por dentro y delicioso. Aclamación por parte de la mesa.
En los entrantes hay tres opciones, nos hemos saltado la crema fina de espárragos blancos … Una de las elecciones ha sido el Carpaccio de boletus, tartar de champiñones portobello, remolacha roja y trufa negra. Sabor penentrante, boletus de primerísima calidad, cada bocado una delicia. Una maravilla de plato.
La otra de las opciones ha sido la Menestra de cardo rojo, bulbo de hinojo, zanahoria tricolor, alcachofa de tallo infinito en caldo de cocción de sus hojas, este último servido en mesa. En todos los platos es de destacar la excelente calidad de la materia prima y su esmerada elaboración. Se armoniza con Blanco Viña Heredad de Segura Viudas. D.O. Penedés.
De los segundos platos sí hemos tomado todas las opciones. Comenzamos por el más consistente y de cuchara, ideal para la estación, se trata del pulpo braseado en guiso de níscalos y pochas. ¡¡¡Fantástico!!! Excelente sabor, excelente producto y excelente ejecución, muy recomendable y muy apropiado. Un arroz meloso con setas variadas, nabos y ajetes tiernos ha sido otra de las opciones. Cantidades en todos los casos muy correctas, así como temperatura y punto de cocción.
La tercera de las opciones de segundos platos ha sido el Solomillo de ternera madurado, salsa de trompetas de la muerte, lombarda, cebollas frescas, remolacha, puré de patata, ajo y jengibre. Carne correcta en textura y deliciosa con el conjunto del plato. En este caso se han armonizado estos platos con Tinto Orube Crianza 2016 C.O. Ca. Rioja.
Y llegamos a los postres, de nuevo tres opciones donde elegir y tres opciones diferentes que han llegado a la mesa. En primer lugar el Bosque de setas shimeji a la vainilla, bizcocho aéreo de pistacho, helado de coco y cake de setas. ¡Por supuesto que sí, los postres saben a seta!. Delicioso cada producto y encantador el conjunto.
Una de las opciones, la tartaleta de confitura de ruibarbo, cerezas confitadas y frambuesas frescas. Elegante y exquisito. En copa de cóctel la panna cotta de zanahoria y jengibre y crumble de remolachas. Una excelente forma de terminar este delicioso menú que para los postres se armoniza con un Freixenet Prosecco D.O.C.
Un café brasileño o Guatemalteco, también incluído en el precio, ponen la guinda final a este menú con una excelente relación calidad/precio, que como hemos dicho tiene una duración efímera y que hay que aprovechar. Es muy recomendable tanto por la ubicación con un amplísimo garaje donde dejar el vehículo, como por el ambiente y la atención. Esperemos que las próximas jornadas sean más duraderas.
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