Navalcarnero gastronómico

Esta centenaria población, cercana a Madrid, en la A-5, es de gran tradición gastronómica, que con el tiempo se ha ido consolidando siendo al día de hoy pionera en muchos de sus preparados. Sin olvidar el atractivo de poder degustar un buen cordero asado en unas cuevas que en su día fueron bodega. Un encanto para disfrutar.

El vino ha sido siempre uno de los valores principales de esta Real Villa, ya que grandes superficies de terreno eran dedicadas al cultivo de la uva, que posteriormente era pisada y elaborada en las bodegas propias de muchísimos habitantes, pues siempre ha sido una población eminentemente agrícola. Dicho vino fuerte, denso, ha ido evolucionando y «profesionalizando», siendo uno de los vinos destacados de la región. Han recibido varios premios y es uno de los integrantes del vino denominado «madrileño».

En todos los restaurantes, además de sus especialidades particulares, vais a encontrar el cordero asado, plato gastronómico típico pues la población de Navalcarnero fué fundada en el año 1499 por segovianos, figurando en su escudo el acueducto de dicha ciudad y la Plaza principal se denomina Plaza de Segovia. Muchos de los mismos tienen cuevas centenarias donde han instalado parte de los comedores.

Siempre los garbanzos ( así como todas las legumbres) han tenido un hueco importante en los platos cotidianos que se han servido en las comidas. Especialmente los garbanzos, conservando al día de hoy su fama y donde anualmente se reconoce celebrando el cocido de garbanzos, donde participan muchos particulares y establecimientos de la zona.

Los dulces, presentes en todas las celebraciones españolas. En este caso hay unos bollos típicos que se elaboran con aceite, con manteca y en fiestas especiales, con almendra. Podéis adquirirlos en casi todas las panaderías (donde se sigue amasando el pan de forma tradicional, especialmente el pan candeal ¡¡¡extraordinario!!!). Nosotros os presentamos el del Horno José Luis, muy cerca de la Plaza de Segovia, en la calle Libertad nº 21.

Se denomina Real Villa, ya que el rey Felipe IV celebró en su iglesia catedral, de estilo gótico mudejar, su enlace con Mariana de Austria, en el año 1649. Como agradecimiento a sus vecinos, el rey le concedió este título.

Pasear por Navalcarnero, muy bien conservada, sin abusos inmobiliarios por el centro. Lo que en su día fué la carretera de Extremadura, que trascurría por el centro de la población, hoy es también carretera, pero de un solo sentido, siendo una de las avenidas principales, de una sola dirección, para disfrutar viendo, comprando y disfrutando de su gastronomía. O de sus famosos encierros. O de su Mercado Medieval. O… Hay mucho para disfrutar.

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