Restaurante DOP (Barcelona)
Pues no son las iniciales del propietario, ni de nadie relacionado, el nombre es Denominación de Origen Protegida, igual que algunos de los productos alimenticios (el vino Ribera del Duero, la alcachofa de Benicarló, pimiento del piquillo de Lodosa, Lechazo de Castilla y León…). En este caso es un restaurante que se denomina de esta forma, veamos el motivo.
Ubicado en la zona alta de Via Augusta su gestor, el empresario Guillermo Ferré, opina que debe ser protegido por todo lo que ofrece. Su cocina de mercado, un ambiente elegante, selecto pues está pensado para que el comensal coma bien y se encuentre cómodo. Se aperturó hace un año y donde sus amplias mesas (casi todas redondas para mayor confort del comensal) permiten que los platos que degustemos en las mismas se hagan confortablemente. Dispone de 300 metros cuadrados de Sala más otros 260 de terraza. Para sentirse cómodos.
Su cocina nos ofrece platos con diferentes influencias, desde sabores y técnicas vascas hasta las presentaciones minimalistas japonesas y por supuesto de raíces mediterráneas, todo ello elaborado con productos de primerísima calidad y unas elaboraciones muy cuidadas. Pescados y gambas de la Lonja de Palamós así como los mejores proveedores para garantizar la calidad. En la sala encontraremos un cortador de jamón ibérico Maldonado (Dehesa de Extremadura) que hará las delicias de los comensales, pues es la joya de la gastronomía española.
Su carta nos presenta platillos para picar, de los que nos gustan siempre, como las mini croquetas de pollo de corral y jamón ibérico Maldonado, hasta las anchoas de Perelló 1898, o el trío de salmón ahumado Carpier. Si nos vamos a los entrantes hay platos que han conseguido un notable éxito como los Tagliotini con colmenillas al oporto y polvo de foie, las deliciosas Sardinas marinadas con pan con tomate (rallado) y nube de parmesano, las Navajas cocidas a 58º con vinagreta de yuzu, cítricos y germinados; o el Ravioli de mató, espinacas, salvia, parmesano y trufa.
Hemos dicho que tiene influencias mediterráneas, por lo que los arroces son otro de sus platos recomendados, así el seco del día a la brasa (del horno Josper) o caldoso con bogavante nacional. Pero quizás optes por algún toque oriental con su sabroso Tataki de atún rojo con salsa de soja, sésamo y helado casero de wasabi u otras especialidades como el Dado de bacalao, caldito de pimiento choricero, texturizado de aceite y pimentón de la Vera; las Manitas de cerdo deshuesadas rellenas de foie con salsa de trufa; el Cordero a baja temperatura, parmentier ahumado y salsa de menta fresca; o el Txuletón de Oiartzun a la brasa.
Y no pueden faltar los postres caseros. Espectaculares presentaciones y elaboraciones de las que es imprescindible el Mil hojas crujiente de mascarpone, moscovado y fresas al vinagre de módena, el Coulant de chocolate blanco con interior de chocolate negro y helado de mango, o la Torrija de briox caramelizada con crema helada de carquinyolis y toffee de miel. La bodega de vinos se compone de una oferta atrevida (El Racó d’en Cesc, Nandu Jubany, Hotel Mercer, ConsultVI).
Toda esta oferta se complementa con un menú de martes a viernes a mediodía a 22€ con cuatro primeros cuatro segundos, cuatro postres pan y bebida incluídos. Por las noches el menú de tapas, con degustaciones de paletilla ibérica Maldonado, mini croquetas, patatas bravas, mini calçots en tempura (en temporada), panecillo de calamar con mahonesa de Kimchi y lima, pinchos con aliño a la brasa, postre y bebida, por 25€. Su excelente y amplia terraza permite disfrutar de ella casi todo el año y si deseamos llevar la comida para consumir en casa o la oficina, se acaba de poner en marcha el servicio take away. Cualquier plato de la casa puede encargarse para llevar. ¡¡¡ Disfrutar en cualquiera de sus espacios !!!.
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