
Siempre nos han gustado los restaurantes que nos ofrecen un menú, o varios, por lo general bien equilibrados en todos sus platos y que además, en muchos casos, son pequeñas raciones para que la variedad sea mayor. Uno de los restaurantes más destacados de esta población ha preparado 4 menús diferentes para todos los gustos: Verde, Del Mar, Carnívoro y Classic.
Los cócteles de Borja Cortina, la gastronomía de Ricardo Sotres y la ubicación en una casa palaciega asturiana convierten el lugar en un privilegio para disfrutar todo el día desde el vermú hasta la primera copa de la noche, pasando por el aperitivo, una comida, una cena o un tardeo con música en directo.
Siempre que vamos a comer, a cenar o de picoteo o simplemente a tomar un vermú a un restaurante, o cualquier otro establecimiento gastronómico que nos guste le "pedimos" tres condiciones: La primera que se esté cómodo, buen ambiente, bien ubicado, buena atención,... En segundo lugar que los productos empleados para elaborar los platos sean de la mejor calidad y finalmente que su carta, sea corta o larga, nos atraiga desde el primer momento. En este caso la terraza La Madreña cumple las tres condiciones sobradamente.
Un rincón porque está ubicado en un espacio alejado de todos los ruidos si bien cercano a la A-6, con solera porque lleva más de 60 años "dando de comer" a los roceños y visitantes y calidad porque desde sus orígenes han presentado todos sus platos con los mejores productos y excelente elaboración, habiendo evolucionado siempre a mejor tanto en su calidad, variedad y ambiente.
¡Qué delicia el lechazo asado en horno de leña y sabiendo lo que se hace!. Porque el asado se compone de cuatro pasos: Un buen producto, fresco, de tamaño correcto y criado al aire libre, de raza churra. A la hora de asarlo hace falta tiempo (tranquilo, sin prisas, que se vaya haciendo poco a poco, agua y sal. ¿Sólo eso? Pues de momento no hay que poner nada más en la fuente de asado. Pero faltan todavía dos puntos.
Porque a veces unimos el centro con el tema de la invasión del turismo, en este caso hemos elegido un espacio con comida típica castellana, en la Plaza del Rastro, una pequeña plaza en el centro de la ciudad y con amplios salones y buena atención. Hace días ya hablábamos de esta encantadora ciudad en relación con la visita y aperitivo, hoy entramos en el almuerzo que hemos disfrutado cuatro comensales.
El Fuego siempre ha sido uno de los cuatro elementos básicos de la naturaleza, y el más gastronómico, junto al Aire, Tierra y Agua por lo que es algo muy natural, e importante, en la vida. En este caso da nombre a un restaurante donde la mayor parte de los platos son elaborados directamente en las brasas, en algunos casos concretos con una ligera estancia en el horno de leña que preside el salón, en pleno centro de Madrid.
Desde hace unos años se celebra en Madrid el Mes del Rabo de Toro, coincidiendo con las Fiestas de San Isidro. Un plato típico madrileño ¿el segundo después de los callos? hay opiniones diferentes. Una de las recetas es "a la cordobesa" que es la receta que preparan en La Clave. El restaurante La Clave obtuvo el diploma al Mejor Menú del VI Mes del Rabo de Toro. "Este premio es un homenaje a una receta tradicional y reivindica la cocina de casquería en la restauración”, manifestó Ainhoa Gutierrez directora de La Clave al recibirlo. Para su completa degustación ha elaborado un menú maridado por 30€ y que ofrecerá hasta el 31 de Mayo.
Y nunca mejor dicho, porque es una Venta, así con mayúsculas donde nada más entrar se encuentra uno en un espacio donde la amabilidad es lo primero. Con un espacio de barra amplio y una zona de cafetería donde tomar desayunos, bocadillos o platos más consistentes con un fuego que caldea el ambiente y crea una agradable sensación mientras tomamos la bebida y comida solicitada. En el Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama y a dos pasos de la provincia de Segovia.