Bien saben los valencianos, alicantinos y el Levante en general que el arroz admite todo y con esta receta queremos ratificarlo. A priori el salmón no es muy buen aliado de caldos y guisos, ya que es muy graso. De hecho sus espinas y pieles no se aprovechan para realizar fumets. Pues bien, si lo cortamos en dados de 4-5 centímetros veremos que lo podemos aprovechar perfectamente para este plato.
El azafrán está considerado como especia, aunque en realidad son los pistilos de una flor llamada crocus sativus. Es muy popular su uso para las paellas y fideuás, aunque bien se puede utilizar en otros platos de caza, pescados o incluso pasta. Tiene un sabor muy característico e intenso por lo que no es necesaria mucha cantidad para aportar sabor, con unas pocas hebras es suficiente. Yo suelo tostarlas un poco en papel de plata para extraer todo su sabor. En este caso lo vamos a utilizar para aderezar un plato de pescado blanco; si no tenéis merluza, sirve dorada, lubina o incluso lenguado o gallo.