El steak tartare es un plato muy popular en Francia aunque originalmente se remonta al siglo XVII a los tártaros, por las regiones de Europa Oriental y Siberia. La base principal es una carne cruda, pero picada a mano y con una calidad excepcional como es el solomillo. Lo más importante del plato, aparte de la calidad y frescura de la carne, debe ser la limpieza, ya que al no cocinar la carne, puede producir alguna molestia estomacal. Se presenta con unas lascas de parmesano o bien con una yema de huevo cruda.
El nombre de la concha en castellano es venera, aunque se suele usar el de vieira para referirse al conjunto animal-concha, que proviene del gallego. Ambos provienen de Venus, la diosa del amor. Gastronómicamente hablando, son muy ricas y exquisitas y pertenecen a la familia de los moluscos bivalvos, igual que los mejillones, almejas o zamburiñas. Muy ricas también en empanadas o a la plancha.
Plato exquisito donde los haya, las manitas de cordero se consideran un manjar por los expertos gastrónomos. En cocina se utiliza en multitud de países y culturas de las más diversas formas y, a diferencia de las de cerdo, son mucho más sabrosas y menos bastas. El plato es algo complejo y costoso de elaborar pero merece la pena.
La oreja de Judas es una seta seca, plana, con forma de concha y apariencia a una oreja, de ahí su nombre. Se pueden encontrar sobre ramas muertas de alcornoques, plátanos, saúcos y otros árboles de hoja plana. Se pueden encontrar bien a granel o bien en bolsas desecadas. Aunque los gurús de la cocina dicen que las setas no deben lavarse, nosotros lo recomendamos, por higiene. En este caso por necesidad. Para partirlas con un cochillo es mucho más cómodo si están húmedas.
Uno de los platos tradicionales de la cocina catalana es la escalivada, que procede del verbo escalivar que significa "asar al rescoldo". Pues ni más ni menos que en asar consiste el plato. La base es la berenjena y el pimiento verde, aunque las versiones incluyen cebollas, ajos y tomates. Todo ello tiene un tiempo de cocción similar (salvo los tomates), por lo que es un plato muy sencillo, aunque de proceso largo. Se suele tomar templada bien sola sobre pan o acompañando un plato principal.
La berenjena es una verdura y, como tal, no contiene grasas por lo que su aporte calórico es casi inexistente. También tiene bajo contenido en vitaminas, hidrocarburos, proteínas y minerales, aunque el más abundante es el potasio. Casi un 92% de su peso es agua, por lo que cuando se cocina tiende a reducirse bastante. Conviene tener en cuenta que no debe comerse cruda nunca y como consejo, tampoco hervida, pues su sabor es amargo.
También conocida como trompeta de la muerte que debe su nombre a su color negro y su forma. Su sombrero suele medir entre 5 y 15 centímetros y de color negro o gris muy oscuro, mientras que el tallo tiene un color gris claro. Se suele encontrar en esta época, desde finales de verano hasta entrado el invierno, siempre en climas húmedos y cercanos a bosques de hayas y robles. Su sabor es exquisito.