Noticias Breves – Marzo 2024 (III)
Se considera ‘cocinera de toda la vida’, aunque tardó en hacer de su pasión su profesión. De hecho, se crio junto a unos fogones, imitando en una réplica de juguete lo que hacía su madre; recibía clases sobre la materia desde los 6 años; y montó su ‘primer negocio’ -un catering de meriendas para las amigas de la familia donde se llevaba buenas propinas-, con tan solo 12. Su sueño siempre fue dedicarse a la gastronomía, pero su padre, uno de los fundadores de la Cofradía de la Buena Mesa, quiso que estudiara otra cosa. Su madre, su gran inspiración, fue una de las primeras profesoras de Alambique, donde ahora ella misma imparte clases, pero su vida laboral empezó como representante de artistas, concretamente lanzando a la fama a su marido, el mentalista Anthony Blake, con el que viajó y conoció la culinaria de medio mundo.